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lunes, 28 de noviembre de 2011

Ego. YO, YO, YO Y DESPUÉS... YO.

Hay días en los que quizá hubiera sido mejor no levantarse de la cama, hay momentos extraños, y existe algo llamado melancolía... No sé, ultimamente yo vivo un poco así, yo contra el mundo, o el mundo contra mí, una ración más de lo de siempre pero a lo extremo. Viviendo a ratos, soñando y siempre con algo de miedo. Con sentimientos que no conocía, mintiendo a todo el mundo y a mi misma la primera, para que te voy a engañar, sin saber que hacer ni que decir, no me reconzco. Tengo ganas de que vengas y me digas quien soy, que me lo recuerdes un poquito, no lo sé.
He dejado todos los vicios, bueno, todos no, tan solo de fumar y de beber, lo de follar ya es otra historia... pero no es para estar orgullosa, no tiene ningún mérito, simplemente es otra forma de huir, una vía de escape a no sé qué, como todo, yo ya no sé nada.
¿Qué raro todo verdad? ¡y qué común en mí! A veces me pregunto de qué psiquiátrico me habré escapado...

sábado, 19 de noviembre de 2011

Salgamos de esta locura y fundamonos con el viento.



Dónde están las palabras del pasado, dónde quedaron las ganas de ser un ser humano, cómo llegaste hasta aquí sin perder las esperanzas que los tiempos cambian, que los días destruyen pero las miradas alientan.

lunes, 14 de noviembre de 2011

Todo tiene un límite.



"NO BUSQUES CONSUELO EN BRAGAS MOJADAS."



 No corras... si no tienes miedo.


@sophiacork

sábado, 12 de noviembre de 2011

Liveliness.


Cometer el mismo error dos veces en ocasiones puede hacerte dudar de tu honestidad contigo mismo y replantearte la forma que tienes de ver la realidad, quizá no haya sido tan malo cometer ese error, lo difícil es intentar enmendarlo y actuar en consecuencia.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Tengo unos amigos un poco raros...

Andábamos hoy sentados en una terraza frente a la universidad, arreglando el mundo como de costumbre, hablando más de lo que debiéramos y bebiendo más cerveza que un jueves porque hoy es viernes. Hasta ahí todo normal.
Cada uno con sus ideas, debatiendo, discutiendo, tirándonos pipas a la cabeza... pero sin enfadarnos que somos amigos, simplemente arreglamos el mundo con una cerveza en la mano.
Cuando a eso que da un giro de 180º la conversación, comenzamos a hablar de música, y volvemos a enzarzarnos en otra disputa. Yo comento que a mi la canción de "Por ti" de Sidonie me gusta, y el otro me dice que han intentado hacerla muy comercial incluyendo a Adam Jezierski (Gorka de Física o Química) en el videoclip, aunque me parece que queda muy bien justo, cuando para más inri, salta Santi -que lleva toda la mañana en su mundo (el es así, vive entre las nubes)- para decir que esa canción tiene connotaciones altamente sexuales y que somos unos puercos, todo por la frase que reza "Lo mejor del sol a puñados yo te lo doy".


Si... es posible que tenga unos amigos un poco raros, pero al fin y al cabo son mis amigos y, estos momentos, los que dan sentido a mi vida.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Mi vecino del quinto...

Tengo un vecino con el que me cruzo de vez en cuando, supongo que como todos los vecinos, pero este tiene algo especial.
Todos tenemos un tipo de hombre y/o mujer, ya pueden gustarte bajitos, altos, gordos, flacos, feos o guapos. No creía tener un tipo de persona definida en mi mente hasta que hace unos días subí en el ascensor con él. Un chico serio, sencillo, no demasiado guapo y con una sonrisa que dice mucho. Tengo obsesión por las sonrisas, no tienen por qué ser perfectas, simplemente tienen que ocultar algo, un susurro, un beso o una personalidad, y a mí, lo que realmente me interesa es descubrir lo que hay detrás. Y este chico tiene ese no sé qué que qué sé yo.
De vez en cuando incluso tenemos alguna conversación, me pregunta que qué tal los estudios o la vuelta a casa tras algún puente. ¡Quien sabe! Quizá algún día de estos me decida a decirle algo y quedar con él a tomar una cerveza, al menos, para quitarle misterio al asunto.

martes, 8 de noviembre de 2011

Bla, bla, bla...

Y sin demasiadas preocupaciones llegas a darte cuenta de que mientras yo estoy estudiando bajo la luz del flexo de mi habitación la vida continúa. Los coches no dejan de pasar bajo mi ventana, la noche cae antes de que me de cuenta, las voces de la gente, el vecino del quinto no perdona su hora de bajar la basura, creo que no habrá partido hoy, en todo caso aún no ha empezado, no me preocupa porque me enteraré del resultado igual, al otro lado de mi pared está el salón de mis vecinos fieles a cada partido, ya sea la liga, la champions o lo que se ponga por delante. No me caben más libros en el escritorio, me gustaría acabar de leer el periódico de hoy antes de que termine el día, quizá salir a dar un paseo y fumarme un cigarrillo con la fría brisa del otoño golpeándome como si fuera una bofetada para así despejarme un poco antes de darme una ducha y relajarme viendo la primera serie facilona que aparezca ante mí al encender la televisión.

-Antes la Cenicienta salía corriendo para llegar a las doce... Ahora, antes de las once, el príncipe ya se ha follado a Cenicienta. @SophiaCork

Y de como comenzó ese "algo"...


Llegó ese tiempo en el que ni es primavera  ni es verano y aunque te pasas el día desabrigado más
te vale llevar una chaquetita al anochecer. Era un fin de semana de esos que vas a casa de tus padres, aun sabiendo que no habrá nadie, a disfrutar de un fin de semana tranquilo y descansar. Recuerdo que esa noche me llamó mi amigo Christian para quedar, andaba un poco preocupado porque había discutido con su chica y quería desconectar, quedamos los tres, él, otro amigo, Mario, por el que -para que nos vamos a engañar- me sentía bastante atraída y yo. Estuvimos tomando unas copas en el mismo bar que cada fin de semana, no recuerdo que hubiera demasiada gente, tampoco me
preocupaba lo que se encontrara a mi alrededor, la conversación estaba interesante. A eso de las tres el bar se disponía a cerrar y decidimos irnos con la fiesta a otra parte, así que compramos una botella de whisky y bajamos a unos merenderos de las afueras del pueblo a seguir con nuestra conversación.

La música de fondo era al menos de cuando comenzábamos a mocearnos, de esas canciones que todos conocemos y que tan entrañables recuerdos nos traen, andábamos recapitulando, contando historias del pasado, riendo. Comenzaba a notar el efecto de las copas, bailábamos, los tres. Comenzamos a intercambiar miradas, a bailar más descaradamente y creo que la cosa comenzó a notarse, Christian comenzó a decir que estaba cansado y me ofrecí para llevarle a casa, esa noche sólo yo había sacado el coche.

Obviamente Mario y yo no nos íbamos a quedar solos. Éramos de estos amigos que se lo cuentan todo pero de vez en cuando me sentía incómoda en su presencia, moreno, de ojos negros, cuerpo de infarto y sonrisa de niño... Me dijo de parar a fumar cigarrillo antes de dejarle en casa, ya amanecía, y entre conversaciones banales me besó, sin venir a cuento, quizá los dos lo deseáramos pero yo no lo esperaba. Fue un beso tímido a la vez que decidido. Me aparté por un instante.

-Somos amigos...- no sabía que otra cosa decir.

Se hizo el silencio, nos miramos, di otra calada del cigarrillo, le apagué y volvimos a besarnos. Esta vez nuestros labios se buscaron como si se necesitaran, su mano izquierda sujetó firmemente mi nuca y con la derecha me rodeó, no podía moverme, tampoco quería hacerlo, sentía como mis mejillas ardían. Pero el beso tuvo que terminar, se quedó mirándome con su cabeza ligeramente inclinada y su frente apoyada en la mía.

-Somos amigos... -repetí, no encontraba otras palabras para ese momento.

-Lo sé, pero... ¿que problema hay?- realmente sobraban las palabras.

-Tengo miedo de que mañana podamos arrepentirnos de esto.

-No lo vamos a hacer. -el sol ya estaba en lo alto del cielo, y el pueblo comenzaba a despertar, a lo lejos un hombre con su burro se dirigía al huerto a trabajar, y nosotros, en medio de todo, con desgana, comenzamos a separar nuestros cuerpos y a sentir la primera brisa de la mañana mientras cada uno ponía rumbo a su casa.

Pero esa amistad ya sólo volvió a ser igual a ratos, aunque esa ya sea otra historia.

sábado, 5 de noviembre de 2011

Momentos que hacen que la vida valga la pena.



Llegar a casa despeinada, con cierta turbación y las rodillas temblando. Pero...
FELIZ.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

En el centro de una balanza.


A la derecha hay un sueño y en la izquierda la realidad. Ninguno de los dos lados parece excesivamente prometedor, sé que el sueño no se hará realidad y que la realidad jamás se parecerá a un sueño. Aun así, no sé por cual de ambos decantarme.


"A veces no soy yo, busco un disfraz mejor, bailando hasta el apagón."